¿Qué dijo Spanuolo?

Según el testimonio de la mujer, Spagnuolo habría dicho: “¿Por qué tengo que pagar yo con mis impuestos la discapacidad de otro?”. Esta frase, que se viralizó rápidamente, causó indignación entre familiares, organizaciones sociales y representantes políticos. La madre afectada calificó las palabras del director de la ANDIS como “dolorosas, discriminatorias y profundamente desinformadas”, y aseguró que no representan a un Estado que debe estar presente para quienes más lo necesitan.

Brügge tomó esta denuncia como un llamado de atención urgente. A través de una presentación formal, anunció que solicitará la comparecencia de Diego Spagnuolo ante las comisiones de Discapacidad y de Derechos Humanos y Garantías de la Cámara de Diputados, para que explique no sólo sus expresiones públicas, sino también el rumbo general de la gestión de la Agencia Nacional de Discapacidad.

Compromisos internacionales

El legislador destacó que declaraciones de este tipo no solo hieren la sensibilidad de las familias, sino que ponen en tela de juicio la capacidad del funcionario para ejercer un rol fundamental como es el de garantizar políticas públicas de inclusión, asistencia y acompañamiento. “Una persona a cargo de la ANDIS no puede expresar desconocimiento ni falta de compromiso con los principios de igualdad y apoyo que el Estado debe garantizar a las personas con discapacidad”, afirmó.

Brügge recordó que la Argentina ha asumido compromisos internacionales con la ratificación de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la cual establece en forma clara que los Estados tienen la obligación de promover, proteger y asegurar el pleno goce de todos los derechos humanos por parte de las personas con discapacidad, sin discriminación alguna. Además, subrayó que estos derechos tienen jerarquía constitucional y forman parte del entramado normativo que guía las políticas públicas nacionales.

Asimismo, el diputado señaló que el repudio a Spagnuolo se enmarca también en la polémica por una reciente resolución de la ANDIS que incluía terminología despectiva y obsoleta como “idiota”, “imbécil” y “débil mental”. Aunque la medida fue rápidamente retirada tras la reacción social, Brügge consideró que estos episodios exigen un análisis profundo sobre el enfoque y la formación de quienes conducen organismos tan sensibles.

La agencia y la conducción

“La Agencia Nacional de Discapacidad debe estar liderada por personas con conocimiento, sensibilidad y compromiso real con los derechos humanos. Es indispensable que el director dé explicaciones y que la sociedad sepa con claridad qué visión tiene sobre las personas con discapacidad”, concluyó el legislador.

Con esta acción parlamentaria, Brügge se propone abrir un debate serio y responsable, que ponga en el centro las necesidades de las personas con discapacidad, y exija a los funcionarios públicos el más alto nivel de compromiso ético e institucional.