Ni que hablar de las medidas económicas prometidas: que bajarían la inflación, que no iban a devaluar al levantar el cepo, les faltaba decir: “Síganme, no los voy a defraudar”, cuando Macri al inaugurar Expoagro en la ciudad de Ramallo, anunció que el Gobierno comprará “el sobrestock” lácteo para asegurar las fuentes de trabajo, porque vamos por una revoluciòn productiva. ¿Se acuerdan del benemérito Carlos Saúl Memen de PJ que, con estas políticas nos llevó al default en 2001?
Y ahora que está por salir el índice de la inflación anual, ya con el indice el de diciembre, alcanzó el 40,9% anual, y ahora aumenta un 8% las naftas y con este aumento los productos de primera necsidad,ni hablar de cómo abrió las importaciones(y anuncia abrirlas aún mas) perjudicando a las PYMES y en lugar de llegar las “inversiones, los dólares” nos cargaron al hombro una pesadísima deuda de 90 millones de dólares, ademas de perjudicar a los jubilados que perdieron el 15% del poder adquisitivo, entre muchas otras medidas, que siempre fueron y son en contra de las mayorías, generando más pobreza y hambre.
Por eso, al decir del Diario Registrado: “Lejos de recomponer el poder adquisitivo perdido, el Ejecutivo le ordenó al ministro de Trabajo, Jorge Triaca, que no homologara acuerdos salariales que estén por arriba del 20%.
Se cansaron de afirmar que estaban en contra de las paritarias con techo, de la intervención del Estado en las negociaciones entre empresarios y gremios. Pero ahora que están en el poder, Mauricio Macri y su séquito de CEOs buscarán que los salarios no recuperen ni un punto del poder adquisitivo durante todo el 2017".
Y según dio a conocer el diario La Nación: “En el Ministerio de Trabajo insisten con negociar de acuerdo a la inflación futura y ponen como ejemplo al acuerdo entre el Gobierno bonaerense y los trabajadores estatales, que sellaron un arreglo del 18% pero con la posibilidad de ajustarse si la inflación resulta más alta, señaló el matutino. Se pagará en cuatro cuotas trimestrales de 4,25% cada una.
Pero además, hay otro aspecto de las negociaciones que traerán polémica: la inclusión de cláusulas por productividad. Según el centenario matutino, esto se fue extendiendo en varias paritarias de este año (unas 200 sobre 700 convenios) y el plan es aumentar ese número. Esto va desde adicionales por rendimiento hasta deducciones por ausentismo”.
Lo que una no alcanza a comprender es la actitud no solo de algunos sectores de la política, sino que la población solo reacciona con protestas, en forma dispersa, salvo alguna que otra en conjunto de los gremios como las dos CTA.
Comentan algunos gremialistas locales (La Costa), que no quieren movilizar en forma masiva porque con toda la artillería que tiene preparada el gobierno para reprimir “siempre terminan pagando con su vida los compañeros”.
¿No será que la clase media alta todavía tiene guardados muchos dólares que pudo ahorrar durante el gobierno anterior, dinero puesto a plazos fijos al 26% mensual o están comprando las Letras del Banco Central (Lebacs) que se convirtieron en la inversión más buscada por los ahorristas ?
En fin, no soy Nostradamus, pero que volvió la patria financiera no es ninguna predicción y que los ladrones de guantes blancos continúan enviando dólares al exterior a Panamá o las Bahamas, tampoco me equivoco al afirmarlo, es la cruda realidad que estamos viviendo a diario, viendo además como rematan nuestras tierras o como trabajan en el proyecto de construir bases norteamericanas en Tierra del Fuego y en la Triple Frontera, tampoco me cabe ninguna duda que cada día que pasa, solo nos van dejar la bandera y la escarapela, para no sentirnos tan despojados de esa Soberanía por la que lucharon nuestros próceres.
Antonieta Chiniellato 9-1-17
